Esta colección nació de una transición muy personal.
De un invierno — exterior e interior.
Como Perséfone, bajé al mundo subterráneo — a las profundidades de mí misma, donde habitan las preguntas más crudas, donde no hay luz pero sí verdad.
Modelaba estas piezas justo cuando empezaban a llegar las respuestas. Cuando sentía que algo en mí volvía a la superficie. Pero ya no era la misma.
Perséfone no es solo diosa de la primavera — es la mujer que ha muerto para renacer.
Ella desciende al inframundo y regresa con regalos.
Vive entre dos mundos — la luz y la sombra. Es esposa de Hades — su miedo, su oscuridad, su inconsciente.
Y también es hija de Deméter — conectada con la ternura, el linaje y la memoria.
Esta colección fue mi camino de regreso.
A través de la arcilla, del calor de mis manos, del fuego del horno — hacia una nueva versión de mí.
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Símbolos de la colección:
• La granada — símbolo de madurez, de iniciación femenina y de elección. La creé como un acto de entrega consciente al misterio. A ese momento en que no sabes a dónde vas, pero sí sabes que no puedes quedarte donde estabas.
• Los porta-inciensos en forma de manos — representan el Destino que sostiene. Manos que protegen. Un gesto de apertura hacia lo invisible.
• La Coneja Madre — símbolo del vínculo entre Perséfone y su madre, Deméter. Pero también de esa transformación en la que una se convierte en su propia madre. En su propio hogar.
• Los apoyapinceles con símbolos — como las primeras flores tras un invierno largo. Pequeños signos que nos inspiran, guían y nos recuerdan que la creatividad es pura vida.
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La colección Perséfone es para quienes también han estado en la oscuridad.
Para quienes reconocen la fuerza en lo delicado.
Para las mujeres que atraviesan sus propias transiciones — y crean desde ellas una nueva luz.
